Santander afirma que se requiere ampliar la infraestructura y mejorar el clima de negocios
El nearshoring, también conocido como relocalización de empresas por su cercanía a Estados Unidos, representa una oportunidad para que México pueda crecer por arriba de su potencial en el mediano plazo y, para aprovecharlo, el país debe ampliar su infraestructura y ofrecer un entorno de negocios con certidumbre.
De acuerdo con Rodrigo Brand, director general adjunto de Estudios, Estrategia y Asuntos Públicos de Santander México, la economía del país tiene bases sólidas y esto se refleja en que, tomando en cuenta la cifra preliminar del Producto Interno Bruto (PIB) del tercer trimestre de 2022, en que ya se alcanzaron los niveles prepandemia.
Por lo anterior, no se están cumpliendo las expectativas de un segundo semestre más débil en la economía mexicana y la perspectiva es que el país crezca cerca de 2.5% al cierre de este año.
Pese a esto, advirtió que México no está exento de la desaceleración económica que se prevé para los siguientes meses en todo el mundo.
Para el año que entra habrá una desaceleración respecto a lo observado en 2022 con niveles de alrededor del 1 o 1.2% (de crecimiento del PIB). Los riesgos a la baja son importantes, sobre todo por la incertidumbre de la evolución de economía norteamericana”, detalló en el XIX Encuentro Santander América Latina.
A lo que se añade que la inflación se mantendrá por encima del objetivo de Banco de México (Banxico) debido al aumento en los precios de las mercancías alimentarias.
Brand prevé que la inflación se mantenga en 2022 por arriba del 8%, incluso cercano a 8.5%, y será en 2023 cuando comience a bajar a cerca del 5% para, en el mediano plazo, regresar al rango esperado por el banco central.
Por lo mismo, espera que Banxico siga subiendo la tasa objetivo y en la reunión de la próxima semana la eleve nuevamente en 75 puntos base, para que se mantenga en niveles de 10 o 10.5% en el corto plazo.
Si bien se prevé que el país desacelere su actividad económica para el próximo año, el director general adjunto de estudios de Santander México confió en que el impacto no durará mucho.
Hacia adelante, en 2024, estaremos regresando a niveles de alrededor de 2%. Lo que estimamos es que el crecimiento potencial de México ahora mismo está en alrededor de 1.7 o 1.8% y estimamos que, hacia adelante, estaríamos creciendo por esos niveles”, detalló.
LA OPORTUNIDAD
Brand destacó que, si se aprovecha, el nearshoring puede ser una muy buena oportunidad para que México crezca por arriba de ese potencial.
Si visitas el norte del país, Ciudad Juárez o Tijuana, prácticamente esas localidades se están viendo favorecidas por esta movilidad de las cadenas de producción”, resaltó.
Por lo mismo, la capacidad instalada actualmente de bodegas y/o plantas ya está ocupada y existe la necesidad de ampliarla. Para aprovechar esta tendencia, el especialista consideró que el gobierno y el sector privado deben trabajar para ampliar la infraestructura, incluso ya hay interés por acelerar el financiamiento de parques industriales, y ofrecer un entorno de negocios con certidumbre y estabilidad.
Lo anterior atraerá no sólo inversión, también significará la posibilidad de tener una industria más diversificada.
Creo que las condiciones están ahí y hacia adelante vamos a ir viendo que esto va ir madurando”, concluyó.