Mientras la oposición exige investigaciones internas, el oficialismo apuesta por un enfoque diplomático.
- Senadores de oposición y oficialismo reaccionan con visiones encontradas ante advertencias de aranceles
La carta enviada por Donald Trump a la presidenta Claudia Sheinbaum, en la que advierte posibles aranceles de 30% por supuestamente “no hacer lo suficiente” frente al crimen organizado y la migración, generó respuestas desde el Senado mexicano, pero con posturas divididas.
El senador panista Mario Vázquez criticó tanto el contenido del mensaje como la tibieza, a su juicio, de la respuesta oficial del gobierno mexicano.
En contraste, Heriberto Aguilar Castillo, senador de Morena, respaldó la posición del Ejecutivo federal, resaltando que México está actuando con firmeza, sin ceder soberanía.
Mario Vázquez consideró que la carta de Trump, más allá de su tono provocador, contiene afirmaciones graves que no deben ser ignoradas. “Trump habla como si conociera los vínculos entre el crimen organizado y el poder político en México. Eso debería encender todas las alarmas”.
Para el legislador panista, el gobierno de Claudia Sheinbaum reaccionó con una estrategia de contención y no con una defensa real del país. “Callan lo que deberían investigar. Desvían lo que deberían enfrentar. La dignidad nacional no se construye con discursos vacíos, sino con hechos”, afirmó.
Advirtió que lo que está en juego es la narrativa internacional sobre México. “Si dejamos que Trump defina cómo se ve México desde fuera, estaremos traicionando al país. Nosotros vamos a hablar. Vamos a defender a los mexicanos que viven, trabajan y cruzan la frontera con la frente en alto”.
Desde Guaymas, Sonora, y junto a la presidenta Sheinbaum, el senador Heriberto Aguilar respondió a las declaraciones de Trump asegurando que la soberanía de México no está sujeta a negociación.
“El gobierno actúa con responsabilidad. Somos un país soberano, con un liderazgo que no se subordina, pero que sí construye acuerdos desde la dignidad y el diálogo”, señaló.
El integrante de la Comisión de Asuntos de la Frontera Norte del Senado, afirmó que México ha instalado una mesa binacional de trabajo con Estados Unidos, con la participación de las secretarías de Economía, Hacienda, Energía, Relaciones Exteriores y Seguridad Pública, junto con sus contrapartes estadounidenses.
Mientras la oposición exige investigaciones internas y respuestas más severas a Trump, el oficialismo apuesta por un enfoque diplomático y estratégico que preserve la estabilidad bilateral sin ceder en soberanía.
Ambas posturas evidencian una tensión creciente entre los bloques legislativos, justo cuando se redefine el liderazgo presidencial y México enfrenta amenazas comerciales que podrían tener impacto económico de gran escala.